Nuevos retablos de los mártires amigonianos Fr. Benito y P. Laureano de Burriana

Por Noelia García

Los mártires amigonianos Fr. Benito Mª de Burriana y P. Laureano Mª de Burriana son recordados en dos nuevos retablos en el altar de la Virgen de los Dolores en la Basílica El Salvador de su población natal.

Ambos retablos, obra del artista D. Vicente Traver Calzada, han sido promovidos por la Hermandad de Nuestra Señora Virgen de los Dolores y fueron inaugurados y bendecidos por Mons. Casimiro López Llorente, obispo de Segorbe-Castellón el pasado viernes 22 de marzo, celebración además del Viernes de Dolores.

En el acto estuvo presente el P. Juan Antonio Vives, historiador de la Congregación, que fue el encargado de glosar a todos los presentes las figuras de Fr. Benito y del P. Laureano, hermanos nacidos en esta localidad de Burriana cuyo martirio tuvo lugar el 16 de septiembre de 1936 en los alrededores de Torrent (Valencia) y que fueron beatificados en la Plaza de San Pedro del Vaticano por el papa S. Juan Pablo II el 11 de marzo de 2001.

Sobre Fr. Benito, el P. Vives quiso destacar que pasó la mayoría de su vida religiosa dedicado en cuerpo y alma a la educación de muchachos con problemas y “se caracterizó por su bondad, sencillez, humildad, fidelidad en el cumplimiento de sus obligaciones y por su amor al trabajo”.

En cuanto al P. Laureano, el historiador de la Congregación se centró en su ánimo generoso y compasivo, que lo llevó a estar “siempre atento a escuchar los clamores y necesidades de sus hermanos y a ofrecerles una ayuda eficaz”.

Además de hablar de estos dos grandes mártires amigonianos, el P. Juan Antonio Vives quiso agradecer, en nombre de la Congregación, los esfuerzos realizados por la Hermandad de Nuestra Señora Virgen de los Dolores de Burriana para llevar a cabo los retablos, personalizando este agradecimiento en Dª. Patricia Sanz Franch, presidenta de la Hermandad, y en D. Santiago Ríos Guinot, tesorero y principal promotor de la obra.

Por último, quiso agradecer la bendición de los retablos a Mons. Casimiro, sucesor de nuestro P. Fundador en la diócesis de Segorbe, de la que el P. Luis Amigó fue obispo desde 1913 hasta su fallecimiento el 1 de octubre de 1934.

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