Por Olga Regueira
Continuando con las acciones previstas en el marco del proyecto apoyado por el Ministerio de Asuntos Exteriores Unión Europea y Cooperación: “SITUACIÓN EN ÁFRICA OCCIDENTAL, el caso Benín: Tolerancia ZERO ante la explotación infantil” y con motivo de la celebración del Día de la Mujer, el pasado sábado 9 de marzo se llevaron a cabo diversas actividades con más de 250 participantes en nuestra casa Mártires Amigonianos de Abomey-Calavi (Benín).
La primera de estas actividades estuvo dirigida a niños, niñas y jóvenes. Unos 200 participantes distribuidos en dos grupos, hasta los 13 años y de 14 años en adelante. En un primer momento recibieron la información de por qué se celebra el Día de la Mujer y se analizaron situaciones de su entorno en las que tiene lugar este tipo de discriminación y no se respetan los derechos de las niñas y mujeres.
En un segundo memento, ya en grupos más pequeños prepararon diferentes representaciones teatrales en las que se ponían al descubierto este tipo de discriminaciones en su cotidianidad. Estas representaciones se realizaron ante todas las personas participantes. Para finalizar, las chicas y los chicos realizaron una competición de canciones y danzas. Entre todos decidieron que el equipo ganador fuera el conformado por las chicas, que celebraron con una merienda para todos.
En paralelo, se desarrolló una segunda actividad en la que participaron 53 personas, sobre todo mujeres. En esta actividad el Sr. Leopold DJOGBEDE, director de la Escuela de educadores especializados Laura Vicuña de las religiosas salesianas, expuso la historia de la fecha del 8 de marzo y la razón por la que hoy sigue siendo importante celebrar el Día de la Mujer.
Al Sr. DJOGBEDE le acompañaron varias alumnas y alumnos de la Escuela, que realizaron una representación teatral en la que no dejaban actuar a las mujeres, hasta que, por la insistencia, constancia y lucha de las alumnas, lo lograron. Tras la representación, se abrió un espacio de reflexión y debate en el que compartieron momentos de la vida cotidiana en las que se manifiesta la falta de respeto a las niñas y mujeres de su entorno, compartiendo situaciones personales en los que se visibilizó, entre mucha emoción y compartiendo dolor, muchos momentos en los que se vulneran de forma natural y sin consecuencias, los derechos de las mujeres.
Desde los ponentes y la escuela Laura Vicuña se compartieron herramientas para gestionar mejor y cambiar estas situaciones. La conclusión de muchas de las participantes fue que lo importante era no repetir ni permitir que estas mismas situaciones las sufrieran sus hijas. Para finalizar, se compartió un refresco y se entregó un cuaderno con dos bolígrafos (uno azul y otro rojo) para que vayan apuntando situaciones que no quieren volver a repetir (en rojo) y avances (en azul), expresando lo importante de una educación de calidad, en igualdad y equitativa para hacer respetar los derechos de las niñas y de las mujeres.
