Los amigonianos, en la Asamblea Interfranciscana

Por Fr. Carlos Sagardoy

La Federación Interfranciscana de España celebró su XXXVII Asamblea General durante los días 7 y 8 de octubre de 2023 bajo el lema: “Mirad la humildad de Dios Tu eres alegría” en la Casa de las HH. Franciscanas de la Madre del Divino Pastor de Madrid.

La asamblea reunió a las superioras y superiores provinciales de todas las órdenes, congregaciones e institutos religiosos de inspiración franciscana, femeninos y masculinos, en representación de las 1.200 fraternidades franciscanas existentes en España, participando unas 40 personas. Por nuestra Provincia Luis Amigó, el representante fue Fr. Carlos Sagardoy, secretario provincial, que acudió como delegado de nuestro P. Provincial, Fr. Jürgen Hoffend.

El sábado día 7 la Asamblea se inició con la acogida de los participantes y la entrega de materiales y, seguidamente, la Eucaristía de apertura y oración. Después, el saludo del presidente a la Asamblea, D. Antonio Alvarez Macías, ministro Nacional de la Orden Franciscana Secular (OFS), invitándonos a mirar la amistad de Dios y a trabajar por el Evangelio, deseando que esta asamblea que nos une y nos reúne sea una auténtica fraternidad.  

Y a continuación la 1ª ponencia “Liderazgo hoy a la luz de la Regla”, por Fr. Víctor Herrero. La vicepresidenta, la hna. Alicia García Lázaro,franciscana Hija de la misericordia, presentó al ponente como un “artista de la fraternidad”, es doctor en teología por la Universidad Pontificia de Comillas,además depsicólogo, coach, experto en misión humana, pedagogo y músico.

Víctor Herrero de Miguel, OFMCap. nos habló sobre el liderazgo franciscano. El líder franciscano, además de mirar muchas veces a los hombres, a los marginados, a los insignificantes, los está mirando desde la confianza, desde la mirada de Jesús, con los mismos sentimientos de Jesús, que los mira con las bienaventuranzas.  El liderazgo franciscano es devoto y de amor, y el amor se verifica en la atención. También es la minoridad, ser humilde y muy auténtico.

Por la tarde, los organizadores nos presentaron las pautas para el trabajo en grupos.  Distribuidos en cuatro grupos de ocho personas cada uno trabajamos los siguientes temas:  acompañamiento, corresponsabilidad, minoridad, pobreza, corrección fraterna, sinodalidad y cuidado. Tras el receso se presentaron las memorias y los informes del último curso y terminamos el día con la oración de vísperas, la cena y una velada fraterna donde pudimos compartir nuestras experiencias.

El domingo día 8, tras la oración y el desayuno, tuvo lugar la ponencia de Fr. Manuel Díaz, “La encarnación a la luz del acontecimiento de Greccio”. El hermano Antonio Álvarez Macías (OFS), hizo la presentación de Manuel Díaz Buiza. Es un fraile franciscano, carismático, siempre amable y gran orador, enamorado del Evangelio y del ejemplo de san Francisco de Asís. Siempre vinculado a las comunidades franciscanas y a los grupos de jóvenes, actualmente es el responsable de la pastoral juvenil de los 14 colegios de su provincia.

Manuel nos habló del reto del franciscanismo. Es mirar y pensar nuestra realidad desde la “humanidad de la encarnación”, es seguir a Jesús como Francisco, recreando el abrazo del leproso en la opción por los pobres y el cántico de las criaturas. Es despojarse y desapropiarse de todo, en el cuerpo y en el espíritu, y servir humildemente, especialmente a los pobres. En definitiva, es entender el Ser como donación, porque así se ha revelado Dios en Jesucristo. Manuel concluyó la presentación hablando de las consecuencias teológicas y pastorales que esto tiene para la vida.

Tras el receso, en la segunda sesión de la mañana, tuvimos un diálogo con el ponente y expresamos con agradecimiento los ecos del tema. A continuación, contamos con un tiempo para compartir experiencias y actividades realizadas en torno a la celebración de los centenarios. Después, A continuación, celebramos la eucaristía, presidida y coordinada por el hno. Antonio José Roldán Brancolini, de la TOR, Tercera Orden Regular de Penitencia.

Y con la comida se dio por terminado este encuentro de la Familia Franciscana. Los participantes, como familia, hemos tenido la oportunidad de convivir, escucharnos, escuchar a los ponentes, mostrar nuestras resonancias y compartir el gozo de la fraternidad, la alabanza en común y el pan compartido como signos de nuestra identidad y vocación que año tras año se encarnan en nuestro encuentro de hermanas y hermanos, en nuestra Asamblea General.

Ha sido una buena experiencia el reconocer la gran riqueza de la teología y espiritualidad franciscana, que es Cristo céntrica, compartir con cantidad de familias religiosas, cada una con su propio carisma, y profundizar en la comunión con la gran familia franciscana que quiere en la celebración de los 800 años, mostrar el sacramento de la pobreza y vivir la alegría como estado permanente y trabajar para poner a todo el mundo en estado de fraternidad.

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