
El cardenal Luis Antonio Tagle, Pro-prefecto de la Sección para la primera evangelización y las nuevas iglesias particulares del Dicasterio para la Evangelización, visitó nuestra Curia General, en Roma, el pasado 28 de diciembre.
Fue un encuentro cargado de fraternidad y alegría, en el que el cardenal Tagle compartió su experiencia y asesoramiento en torno al futuro de la misión de la Congregación en Asia, continente al que se refiere como un territorio de esperanza. Durante la reunión, se discutieron las posibilidades de establecer una nueva comunidad en otro país asiático, un proyecto que responde al interés creciente de jóvenes de diversas naciones de este continente por formar parte del carisma amigoniano.

Este encuentro en Roma antecede al próximo evento que se llevará a cabo en Imus (Provincia de Cavite, Filipinas), en el que se profundizará en las perspectivas y pasos necesarios para la expansión de la presencia de la Congregación en Asia. En este contexto, la orientación del cardenal Tagle, responsable de la región asiática en el Discasterio, resulta fundamental para consolidar esta visión misionera.
Considerado una de las voces más representativas del pensamiento teológico asiático, el cardenal Tagle tiene una trayectoria destacada en la Iglesia. Fue nombrado arzobispo por el Papa Benedicto XVI en 2011, un episcopado caracterizado por su compromiso con la realidad de su país, lo que lo llevó a enfrentar persecuciones por parte del gobierno. Durante el pontificado del papa Francisco asumió roles de gran relevancia, entre ellos, el de presidente delegado del Sínodo extraordinario de obispos sobre la familia en 2014. Posteriormente, el 14 de mayo de 2015, fue elegido presidente de la Caritas Internationalis, cargo desde el cual ha promovido acciones de caridad y justicia social a nivel global.

El espíritu de colaboración y diálogo que marcó esta jornada reafirma el compromiso de la congregación con la evangelización global, animados por el carisma que los impulsa a seguir construyendo puentes de fraternidad y esperanza en todo el mundo.
Texto y fotos: Oficina de Comunicaciones de Curia General